Ola de frío en Sudamérica

Mientras medio mundo estamos inmersos en la parte más cruda del verano, en el otro medio se encuentran en este momento en pleno invierno. Debido a la inclinación de la Tierra con respecto al plano de la eclíptica (plano en el que están los centros del Sol y de la Tierra), en nuestro planeta se producen las estaciones. A lo largo del año va variando la inclinación con la que los rayos del Sol llegan a un punto determinado de la Tierra, y de esta forma se suceden las estaciones: primavera, verano, otoño e invierno. Como pueden comprobar en el siguiente gráfico, cuando en el hemisferio norte se produce el verano, el sur está inmerso en el invierno, y al revés...es una consecuencia de dicha inclinación de nuestro planeta y de su giro alrededor del Sol.

Este invierno está siendo especialmente duro en América del Sur, donde las bajas temperaturas están dejando víctimas mortales a su paso. En concreto, parece que el responsable de este crudo invierno es el fenómeno de La Niña, que consiste en un enfriamiento de la superficie del mar más allá de lo normal en el Pacífico central y oriental, y que tiene impacto sobre los patrones metereológicos globales. Es el fenómeno contrario al más conocido Niño. En años de La Niña, en América del Sur, predominan condiciones más secas y más frías de lo normal sobre El Ecuador y Perú; así como condiciones más húmedas que lo normal en el Noreste de Brasil. Este fenómeno también tiene repercusiones en los parámetros climatológicos a nivel mundial, por esas interconexiones que existen en el sistema climático.

Hasta el momento, una de las zonas más afectadas es Perú, donde el intenso frío ha dejado ya 112 muertos y miles de afectados. Pero como decíamos, los efectos de esta ola de frío se hacen sentir en gran parte de sudamérica, y ya ha dejado a su paso más de 15 muertos en Argentina, 23 en Bolivia donde se han llegado a registrar hasta -22ºC en Laguna Colorada, del departamento de Potosí, 12 muertos en Paraguay, etc...Además de las miles de personas afectadas. de los campos arrasados y de las cabeza de ganado que también están sufriendo el azote del frío.

Hay que recordar, llegados a este punto, un aspecto que a muchos llama la atención, inmersos como estamos en esta tendencia actual de temor ante el calentamiento global: en el Mundo, muere mucha más gente por frío que por calor. El frío es, sin lugar a duda, un asesino mucho más eficaz.

Ya ven, mientras en Europa estamos sufriendo las consecuencias del verano, con sus altas temperaturas, en el otro lado del mundo, en Sudamérica, el frío sigue cobrándose vidas humanas. Los contrastes climáticos de la Tierra son así..