La cara menos amable de la Naturaleza
Antonio Rivera - 20 Ene 2012 - 16:07 Seguir @meteolp
La verdad es que no ha sido un fin de semana muy tranquilo....La Naturaleza tiene estas cosas: unas veces se comporta de forma tranquila, regalándonos estampas y situaciones bellas, mientras que de vez en cuando muestra sus garras y nos recuerda que su fuerza no tiene límites, por mucho que los humanos nos consideremos tan poderosos como para poder controlarla.
El terremoto de Chile, con unos espectaculares 8.8 en la escala de Richter, se sitúa por derecho propio dentro de los terremotos más intensos registrados. Hay que recordar que la escala de Richter es una escala logarítmica, por lo que aumenta de forma esponencial. Esto significa que cada grado es diez veces mayor que el anterior, de modo que un terremoto de grado 2 no es el doble de violento que uno de magnitud 1, sino diez veces más violento. Y uno de grado 3 no es el triple que uno de grado 1, sino 100 veces más violento. Para que se hagan una idea, la energía liberada por el sismo chileno fue 500 veces más poderosa que el haitiano. Aún así, la destrucción que un terremoto deja tras de sí no sólo depende de la intensidad del mismo, sino que depende de otros factores como la profundidad a la que se sitúa el epicentro, la distanca de éste a zonas pobladas y, sobre todo, el país al que afecte: en países pobres, donde mucha gente vive en chavolas y los edifícios no están construidos para aguantar fuertes terremotos, el número de víctimas y de daños producidos son siempre mucho mayores. Aún así, la fuerza del seísmo en Chile (país muy preparado en estos temas) muy probablemente superen el millar, lo que nos da una idea sobre la verdadera magnitud del terremoto que sufrió.
Por otra parte, el paso del ciclón extratropical Xynthia, ha dejado también muerte y destrucción, sobretodo en Francia, donde varios factores se unieron para amplificar la tragedia: Xynthia afectó a la zona oeste del país, acompañada de vientos de procedencia marítima, lo que unido a la marea alta que se registraba cuando pasó y a la subida del nivel del mar que se produce cuando la presión desciende, hizo que el mar se apoderara de muchas zonas costeras.
En nuestro país Xynthia ha dejado a su paso 3 víctimas mortales, muchos daños materiales y rachas de viento que han llegado a superar los 200Km/h en zonas elevadas del País Vasco.
La Comunidad Valenciana se quedó un tanto al margen de la situación y sólo hay que destacar algunas rachas de viento fuerte, como las que se registraron en Villena por encima de los 90Km/h, además del ascenso de temperaturas importante y súbito que se produjo en la madrugada del sábado al domingo con la llegada de las rachas de viento más fuerte. En la gráfica siguiente, y a modo de ejemplo de esto que les comento, se observa dicho aumento térmico en la ciudad de Oliva, en concreto un ascenso de más de 12º de temperatura en poco más de media hora a última hora del pasado sábado y primeras horas del domingo, debido a la entrada de la masa cálida de aire canalizada en el flanco sureste del ciclón Xynthia. A las 0.40 del pasado domingo, Oliva tenía una temperatura de 26.8ºC, algo propio de las noches más calurosas del verano.
Estos ascensos bruscos suceden algunas veces al paso de fuertes tormentas, cuando existe una masa de aire cálido en altura y de golpe desciende haciendo subir los termómetros de forma importante. En este caso, el fenómeno se debió a que en superficie existía una masa de aire fresca procedente del mar, que cubrió de nubes bajas los cielos costeros de la comunidad el sábado. Con la llegada de las rachas fuertes, esa masa fue sustituida por una mucho más cálida que nos traía Xynthia, y que hizo que en puntos como Melilla se alcanzaran unos alucinantes 34.3ºC el sábado, lo que supone el récord de temperatura máxima registrada en España en un mes de febrero.