El mes de junio de 2010 NO fue el más cálido de la historia de la Tierra

Antonio Rivera - 20 Ene 2012 - 16:09

Seguro que estos últimos días han leido u oído titulares acerca de que "el pasado mes de junio fue el más caluroso de la historia de la Tierra"... Toma ya!, no me negarán que el titular es de lo más llamativo. Un titular perfecto para alimentar la cada vez más mediática historia del calentamiento global...

Vayamos por partes: en primer lugar, el estudio en el que se basan para tan grandilocuente titular, es el que cada mes realiza la NOAA, la National Oceanic and Atmosferic Administration, que cuenta con un archivo histórico de mediciones climáticas mundiales que se remontan a 1880. Se puede aceptar, aunque con dudas fundadas, que los datos que nos ofrecen pueden ser ciertos, aunque hay muchas voces cualificadas que acusan a esta institución de partidista y manipuladora a la hora de investigar el cambio climático. Según este centro, el pasado mes de junio ha sido el más cálido desde que se toman datos, por tanto desde 1880 NO desde que se formó la Tierra ni mucho menos... Nuestro planeta cuenta con unos 4.500 millones de años de historia, durante la mayor parte de los cuales (cerca de un 80% del tiempo) las temperaturas en la superficie fueron mayores que las actuales. Valga como dato que mientras los dinosaurios dominaban nuestro planeta, las temperaturas eran entre 6 y 10ºC mayores que las actuales.

Si hay algo que le gusta a la prensa son los titulares llamativos, esos que llaman la atención de la gente y que por si solos son capaces de vender periódicos o de mantener la atención de los telespectadores. Una de las causas por las que el cambio climático es siempre noticia es por que es capaz de generar estos titulares, además de mantener viva esa especie de espada de Damocles que la condición humana necesita tener siempre sobre sus cabezas, bien sea en forma de fin del mundo, guerras nucleares, pandemias globales, extraterrestres beligerantes, etc, etc...

El cambio climático es, sin duda, el mayor reto al que se han enfrentado los científicos a lo largo de la historia de la ciencia, tanto por su complejidad como por sus posibles consecuencias. A día de hoy, seguimos sin tener claro cómo puede responder el sistema climático a la alteración que provoca nuestra existencia. Mientras los científicos deben seguir investigando, los medios de comunicación tienen que seguir informando, sin caer en el titular llamativo y falso, y sabiendo de una vez por todas que su labor en este caso es alertar, nunca alarmar. Como dice una de las leyes no escritas del periodismo, no dejes que la verdad te estropee una buena noticia.